Interpretando con El Gran Tarot Esotérico.

El Tarot Esotérico, está compuesto de 22 cartas simbólicas .Las siete primeras de ellas, hacen relación a la vida intelectual del Consultante (Arcano I), las siete segundas a la vida moral y las siete terceras, a la vida material. Es decir las cartas del Arcano Mayor representan las fuerzas físicas y espirituales que afectan al hombre: dolencias, enfermedades, muerte, lucha, guerra, poder, amor y religión. La vigésimo primera carta es transitiva (El Loco). Es decir las cartas del Arcano Mayor representan las fuerzas físicas y espirituales que afectan al hombre: dolencias, enfermedades, muerte, lucha, guerra, fuerza, poder, amor y religión.

Es un tarot que no sigue la líneas convencionales de los clásicos, posee características e inspiraciones propias, incluso considerando en la ruta del saber, al hombre (como especie) en forma de vanidad o ego, en cuya senda deberá toparse con múltiples aventuras para su avance, la carta de el Loco ( la esencia en los tarots clásicos, alcanza el lugar veintiuno, aunque conserva el no ser asignada a un número y consiguiente interpretación númerica ,como carta transitiva), esto en señal de pensamiento irreflexivo y actos de abandono absoluto, una vez que se ha cambiado absolutamente de posición sea en buena o mala forma con la llegada del arcano XX El Ciclo, antes de alcanzar la recompensa final o la incapacidad de visión para concluir. ( Arcano XXII, El Mundo)

Síntesis de los Arcanos Mayores

El camino del conocimiento y la iluminacion comienza en forma de La Vanidad (Arcano I , El Consultante) , que iluminada por la Ciencia (Arcano II, La Consultante), es manifestada por la Acción, creando la Reacción , un poder del cual hace uso según la Inspiración ( buena o mala). Después de haber dominado la Prueba, por su Victoria entra en posesión de la obra que ha creado y estableciendo su Equilibrio con Prudencia, domina las oscilaciones de la Fortuna. El curso del tiempo se mide por Ruinas, pero más allá de éstas se ve brillar la Esperanza o la Decepción . El hombre aspira la Felicidad pues ésta no se levanta sino detrás de la Tumba y de la Renovación que la Tumba impone y que según haya sido bueno o malo le trae la Recompensa o la Expiación.