Maestro y discípulo

Mercurio en Géminis /Júpiter en Sagitario
Significado de la carta: la enseñanza y el aprendizaje, la inclinación a lo espiritual, el eterno estudiante, el impostor, no sentirse obligado espiritualmente.

El problema: el dilema que tiene "el consultante" es para definirse como discípulo (aprender) pero tampoco tiene el coraje para enseñar. Esto causa que esté en "tierra de nadie" y le quita energía, y por ende, no existe ninguna evolución espiritual. Ha extraviado su camino y se ve atrapado en algún lugar entre el papel de maestro y el papel de alumno. No te puedes observar como el alumno, pero no encuentras la valentía para instruir. Esta tierra de nadie le está quitando energía intelectual y le hace sentirse oprimido entre "no ser más" y "haberse vuelto". El conocimiento que has conseguido aún carece de responsabilidad – en este momento no se está creciendo espiritualmente.

Como única carta nos habla de aquella persona que instruye y también de aquel que aún no está capacitado para enseñar, ambas figuras están a la sombra de un viejo árbol, sinónimo de sabiduría pero ambos están parados con diferente actitud. La ambivalencia que hay dentro nuestro no sólo se refiere a actitudes marcadas como masculino /femenino, sino también aquellas que vamos adquiriendo.

Mercurio y Júpiter nos señalan de un buen momento para aprender y expandir a través e medios de comunicación con lo aprendido, sin embargo, Sagitario como la carta madre en El Predicador, nos advierte de seguir emprendiendo la búsqueda interior hacia un conocimiento superior que nunca acaba.

Consejo: aún estando en una buena etapa de comunicación y expansión intelectual es bueno aprender a transmitir nuestros conocimientos y experiencias con enfoque de humildad y espiritualidad.